Documental griego producido por Aris Chatzistefanou, Katerina Kitidi y Leonidas Vatikiotis en el que se aborda el fracaso de veinte años de políticas privatizadoras en siete países de Europa.
Slavoj ZizekEn palabras de Leónidas Vatikiotis, encargado de dar sustento científico al guión: “Quisimos evidenciar la falacia del neoliberalismo (…) Para ello elegimos ejemplos en países ricos, donde se cumplían las propias leyes de mercado.”
El título de este filme es una simbiosis de los términos catástrofe y troika, éste último en alusión al triunvirato financiero articulado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Por otra parte, el término también rememora el experimento de privatización llevado a cabo durante la era Yeltsin que dio paso al hundimiento de la Unión Soviética.
El documental cuenta con la participación de importantes voces críticas y altermundistas (Naomi Klein, Luis Sepulveda, Slavoj Zizek, Ken Loach y Greg Palast) y destacados especialistas en el tema (Dani Rodrik, Alex Callinicos, Ben Fine, Costas Douzinas, Dean Baker y Aditya Chakrabortty).
Finalmente, cabe mencionar que Catastroika, un proyecto de financiación colectiva y distribuido bajo una Licencia Creative Commons, se sitúa como la continuación de Debtocracy, un documental lanzado en abril de 2011 por el mismo equipo de producción que analiza las causas y posibles soluciones de la crisis económica en Grecia.
—Visto en 3i
Ciertamente,el Estado no ha sido inocente, en tanto que se ha aliado con el alto sector privado y especialmente financiero, así que no libremos a los culpables de sus culpas y de su responsabilidad moral y penal) a estas alturas, por favor.
No sé de donde has extraído tus fuentes, Mauricio, pero me gustaría conocerlas. Las mías, tanto liberales como socialistas, coinciden en señalar como culpables de la crisis las actuaciones incontroladas y faltas de restricción del sector financiero, especialmente en el terreno de las hipotecas subprime. Los países nórdicos, donde las políticas estatales permiten y facilitan las jornadas laborales parciales y una mayor cuantía de subsidios tanto para el desempleo como para la vejez, se han visto mucho menos afectados por la crisis que aquellos países periféricos (como España, Grecia, Irlanda, Portugal e Italia) donde se trabajaba más y donde había menos intervención estatal.
Me parece muy sesgado el documental, toda vez que lo que ha llevado a Europa a la crisis en que está sumergida ha sido justamente sus políticas “no liberalismo” (pensiones financiadas por el estado, jubilaciones tempranas, pocas horas de trabajo semanal, subsidios al desempleo, etc.)
Los testimonios y argumentos apenas logran acercarnos a la complejidad del tema, considerando otros casos (México, por ejemplo), resulta que también la propiedad estatal puede ser una forma de exacción irresponsable o, quizá sea mejor decir corrupta y convenenciera en beneficio de grupos de interés.
Es un documento para ver y pensar varias veces. Es un tema que merece ser filmado y discutido desde muchas perspectivas. Buen esfuerzo, buen hallazgo.