Perfil sociodemográfico del aborto inducido es una estudio realizado a finales de los años noventa por Evelio Cabezas García, Ana Langer Glass, Luisa Alvarez Vázquez y Patricia Bustamante, cuyo principal objetivo fue identificar las características sociodemográficas de las mujeres cubanas entre 13 y 34 años que habitan en el municipio Diez de Octubre, el más populoso de La Habana, y su relación con el aborto inducido durante el primer embarazo.
La idea de rescatar los resultados obtenidos de la investigación mencionada tiene el objetivo de mostrar la experiencia y efecto producidos por la práctica del aborto inducido en sitos donde su prohibición no es punible judicialmente desde hace ya algunas décadas, permitiendo de esa forma vislumbrar un futuro horizonte de problemáticas y soluciones en paises que apenas han adoptado esa legislación. Es el caso de la Ciudad de México, que el pasado 24 de abril de 2007 se convirtió junto con Cuba, Guyana y Puerto Rico, en los únicos sitios de América Latina y el Caribe que han modificado sus leyes para despenalizar el aborto.
La población objetivo para esta investigación, N=1528, fue dividida en dos grupos de comparación: el primer grupo de mujeres cuyo embarazo terminó en aborto inducido (659); y el segundo grupo de mujeres, conformado por quienes optaron por terminar el embarazo (869).
Principales resultados. Factores de riesgo asociados al aborto inducido
Escolaridad
- De las mujeres que optaron por terminar el embarazo 49.8% tenían estudios preuniversitarios finalizados y casi el 10% eran universitarias.
- De las mujeres que decidieron abortar 55% tenían escolaridad preuniversitaria, mientras que 5.5% eran universitarias.
Estado civil
- Las mujeres de 20 a 24 años presentan 2.1 más riesgo de abortar el primer embarazo que las mujeres mayores de 25 años y más.
- Las mujeres unidas son 2.3 más propensas a practicar el aborto inducido que las mujeres casadas; a su vez las mujeres solteras presentan 9.5 más riesgo que las casadas.
- El 56% de las mujeres que abortaron eran solteras.
- El 70% de las mujeres que parieron estaban casadas y 15% eran solteras.
Situación laboral
- El 60% de la mujeres que abortaron no tenían empleo remunerado.
- Mientras que el 64.5% de las mujeres que decidieron terminar el embarazo sí tenían empleo remunerado.
Profesión
- De las mujeres que abortaron 32.7% eran amas de casa.
- El 26.7% eran estudiantes.
- En tanto que más de la mitad de las mujeres que parieron (54.9%) eran profesionales.
Experiencia sexual
- El 81.5% de las mujeres que abortaron iniciaron sus relaciones sexuales antes de los 20 años.
- Sólo el 0.9% ellas iniciaron su vida sexual a los 25 años en adelante.
- Por otro parte el 77.2% de la mujeres que parieron comenzaron a tener relaciones sexuales antes de los 20 años, mientras que el 2.3% inició su vida sexual a los 25 años y más.
Aunque históricamente la práctica del aborto legal no ha logrado disminuir significativamente en Cuba, es importante afirmar que su ejercicio en condiciones sanitarias óptimas permitieron disminuir la mortalidad materna relacionada con este ejercicio quirúrgico en un 60% durante el periodo de 1970 a 1990.
De igual forma es relevante mencionar que las mujeres sometidas a esta práctica no están libres de sufrir efectos secundarios tanto de orden psicológico como ginecológico, por tal razón el mayor conocimiento de sus causas y de los grupos más vulnerables contribuirá en gran medida a planear políticas sociales adecuadas en beneficio de la salud reproductiva de la mujer.
magnífico el estudio y realmente fascinante saber estas conclusiones sobre el aborto inducido.
Estoy haciendo un estudio sobre perfil demográfico de los estuidantes de mi colegio en la ciudad de Cúcuta una ciudad en Colombia, con el objetivo de diseñarle una base de datos, pero realmente estoy un poco enredado pues necesito información sobre lo que debo preguntar para que quede completo e este perfil se le debe añadir por supuesto un a parte del perfil epidemiológico del estudiante.
desde Cúcuta ciudad fronteriza con venezuela