El célebre motor de búsqueda Google fue laureado el día de ayer con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2008. Según determinó el Acta del jurado ©Google Inc. se hizo acreedor a esta distinción:
Al poner de forma instantánea y selectiva al alcance de centenares de millones de personas el enorme caudal de información de Internet, Google ha hecho posible, en apenas una década, una gigantesca revolución cultural y ha propiciado el acceso generalizado al conocimiento. De este modo, Google contribuye de manera decisiva al progreso de los pueblos, por encima de fronteras ideológicas, económicas, lingüísticas o raciales.
Si bien es indudable la enorme contribución de Google referente a la procuración de recursos informáticos innovadores para la exploración de conocimiento universal en Internet, su postura ideológica, aparentemente neutral, permanece bajo sospecha. Imposible mensurar sus aportaciones fuera de un contexto político y social. Recordemos su colaboración con el gobierno chino al filtrar los resultados de ciertas consultas que puedan alterar el régimen establecido en China.
Lo mismo sucede en la consulta de servicios como Google Maps donde algunas zonas geopolíticas resultan imposibles de visualizar. Asimismo no olvidemos que Google obedece a peticiones judiciales para borrar sitios web.
Antes que una novedosa herramienta que organiza y facilita la información del mundo ©Google es una empresa que pone en práctica nuevos modelos de negocio basados en la gratuidad de servicios donde el beneficio privado es obtenido mediante el beneficio público.
©Google opera cada vez más a un nivel monopólico traspasando las barreras de la realidad virtual. La creciente acumulación y tratamiento de información privada en sus manos avizora en la mente de futurólogos un porvenir apocalíptico no muy lejano.